Traer liviandad y diversión en medio de la confusión

Hoy me di cuenta después de tres días de frustrarme porque no lograba "inspirarme" o algo más simple aún...organizar mis ideas, que necesito dejar de tomarme en serio.

Vengo con días de sentir mucha frustración, enojo. Frustración de no lograr sacar hacia afuera lo que tengo dentro. La ansiedad por plasmar en una propuesta clara eso que late en mi, crece día a día bajo la mirada exigente de mis propias expectativas. Un combo opresor.

Durante estos tres días, me levante con la decidida meta de avanzar en estructurar mi propuesta: dar orden a algunas ideas que vengo dando, al menos dejarlas en papel. Y una vez más, estoy frente a la computadora, con la mente confundida y las ganas de hacerlo en franca decadencia

¿Pero qué me pasa? ¿Dónde está esa versión de mi que programaba una hora para trabajar, y en ese tiempo lograba terminar ? ¿Dónde está esa versión de mi que cumplía (mejor) con mis expectativas?

Pienso en esta versión que soy ahora, y francamente no me gusta nada: confundida, falta de inspiración, sin saber hacia donde dirigir su energía. Una vez más, enojada y luchando conmigo misma ...y a la vez buscando desesperadamente la manera de estar mejor.

Hago una pausa.

¿Qué me trajo a este punto? "lo ELEGI". Como una voz lejana aparece entonces eso que hace un tiempo atrás me dije a mi misma, ese compromiso que tome con intentarlo, con salir al camino a explorarlo, con elegir una y otra vez aprender, sostener...aunque duela, aunque no sepa, aunque me pierda. Volver una y otra vez al camino. Aunque no conozca el próximo paso, y apenas crea en el que estoy dando, seguir caminando.

Me doy cuenta que no importa ahora el resultado (y no sé cuánto importará más adelante), sino mi compromiso conmigo, con los valores que elegí y reafirmo ahora, con la aspiración de salir a explorar y descubrir ...sin necesidad de mapas, solo conectando con el territorio. Y resulta que el territorio es este instante: mi mente confundida, la desolación y la soledad que siento, las dudas sobre si lo lograré, el enojo por no lograrlo aún, la frustración por mis intentos fallidos, la aspiración por lograrlo, la desesperación por recibir una señal de avance, el cielo gris y naranja, la lluvia que moja mi balcón y me entristece, el olor al sándalo que acabo de quemar, la música de fondo de Mercedes Sosa que me sacude el alma.....y la falta de qué agarrarme.